domingo, 7 de diciembre de 2014

Pechuga de pollo hasselback.




¿Buscáis un plato muy económico, que parezca un plato especial y sepa a auténtico plato de fiesta? Lo habéis encontrado.


Necesitamos ½ pechuga de pollo por persona, unas lonchas de jamón serrano, patatas, cebolla, champiñones y leche evaporada. Aparte, lo de siempre, sal, pimienta negra, aceite…

Yo tenía las pechugas congeladas así que aproveché y antes de que descongelaran totalmente les hice unos cortes, sin llegar hasta el fondo.




Calentar el horno a 180º/190º.

Salpimentar y poner dentro del corte unos trozos de jamón.

Pelar las patatas, partirlas en lonchas y freírlas, sin llegar a hacerlas totalmente.



En una fuente de horno poner una cama de patatas semifritas, encima las pechugas y meter al horno unos 30 minutos.


Mientras se asan las pechugas vamos haciendo la salsa de champiñones.

Partimos cebolla y la sofreímos a fuego lento hasta que empieza a estar transparente; añadimos los champiñones en trocitos y cocinamos 4 ó 5 minutos para que evaporen el agua.

 








Añadimos leche evaporada y dejamos cocer despacio unos 10 minutos. Rectificamos de sal.

Podemos triturar la salsa o, como yo hice, dejarla así.


Ponemos la salsa por encima de las pechugas y dejamos en el horno unos 5 minutos más.
 




 
Yo vi aquí esta receta y desde el primer momento me apeteció hacerla. 

Hice algunos cambios para que resultara más ligera.



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