Hoy os traigo la receta de un plato tradicional
italiano, aunque tengo que deciros que me entraron muchas ganas de hacerla
cuando se la vi hacer a Jamie Oliver en
un programa de televisión.
Estas recetas de carne, hechas despacio, a fuego
lento, con tiempos de cocción largos me gustan mucho. Tienes “trabajo” los
primeros 15 o 20 minutos, hasta que lo pones en marcha después solo requieren
un vistazo de rato en rato para comprobar que todo va bien. Lo puedes hacer con
antelación, incluso el día antes y dejarlo reposar: estará incluso mejor.
Necesitamos:
Carne de morcillo, partida en trozos grandes, con un
grosor de unos 3 ó 4 centímetros.
Una o dos cebollas, dependiendo del tamaño, en todo
caso bastante.
Dos zanahorias.
Dos dientes de ajo.
Tomate natural triturado, unas 5 ó 6 cucharadas.
Un vaso de vino blanco.
Harina.
Aceite de oliva, sal, pimienta negra molida.
1 hoja de laurel seco.
La piel rallada de ½ limón.
Empezamos poniendo sal y pimienta negra a la carne; la
pasamos por harina.
En una cazuela amplia, para no tener que amontonar
los trozos, ponemos tres o cuatro cucharadas de aceite de oliva y freímos la
carne hasta que se doren. La sacamos a un plato.
En la misma cazuela añadimos la cebolla, los dientes
de ajo, las zanahorias, todo partido, pizca de sal y la hoja de laurel. Dejamos
que se sofría un poco y cuando empiece la cebolla a ablandar volvemos a poner
la carne, subimos el calor y agregamos el vino blanco y el tomate. Dejamos que
se evapore el alcohol, durante dos o tres minutos.
Tapamos la cazuela, bajamos el calor y dejamos cocer
despacio, despacio. Con el jugo que suelta la cebolla, el tomate y el vino tendrá
suficiente líquido para cocer, pero si veis que necesita más añadimos un poco
de caldo (o agua).
Hasta aquí todo el trabajo porque ahora solo nos
queda dejarlo cocer hasta que la carne esté bien tierna, 1 hora y media la tuve
yo.
Apagamos y agregamos la piel del limón recién
rallada. Dejamos que repose mientras preparamos el acompañamiento.
Se puede servir con pasta, con arroz blanco, con
patatas fritas o con un puré de patatas espesito…si además ponéis una ensalada
plato completo.
¡Y listo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario