lunes, 13 de febrero de 2023

Ensalada templada de judías verdes y champiñones con tahini.


 

Dice la teoría de la “ensalada perfecta”, si es que eso existe, que debe llevar un poco de todo: un poco crudo, un poco cocinado, un poco de proteína, un poco de fibra y vitaminas…

También hay quien dice que lo importante es el “color”: cuantos más colores mejor porque indican distintos nutrientes.

Bueno, esta ensalada no es la “ensalada perfecta” pero, además de muy rica creo que es bastante completa.

Necesitamos para uno, como plato único:

160/170 gramos de judías verdes.

6/8 champiñones.

2 zanahorias medianas.

100 gramos de jamón de york.

1 cucharada de tahini*.

2 dientes de ajo.

Sal, aceite de oliva virgen extra.



Empezamos pelando, partiendo y cociendo las judías verdes (después de despuntarlas y quitarles los posibles hilos laterales) y las zanahorias, en agua con sal.

Las hervimos lo justo para que queden tiernas pero no blandengues. El tiempo dependerá de la calidad y lo fresca que estén.

Escurrimos y reservamos.

Mientras preparamos los champiñones: después de limpiarlos muy bien los partimos; en una sartén ponemos dos cucharadas de aceite y freímos dos ajos picados; antes de que cojan color añadimos los champiñones, salamos  y dejamos que se cocinen unos minutos, 6 ó 7.



Agregamos el jamón de york en taquitos, subimos el calor y cocinamos un minuto más.



Ponemos las judías y las zanahorias, revolvemos y dejamos que se mezclen bien todos los ingredientes.

Mezclamos una cucharada de tahini con una cucharada de agua para aligerarlo un poco.

Servimos templada y ponemos por encima el aderezo.



Podéis sustituir el jamón de york por huevo cocido, langostinos pelados a la plancha, tiras de pechuga de pollo, rebozadas y fritas…

Si la preferís vegana añadís algún vegetal más: alcachofas, espárragos, maíz dulce…

*Tahini o tahina: es una pasta hecha con semillas de sésamo o ajonjolí cuyo consumo se ha popularizado mucho últimamente sobre todo por la elaboración del hummus.

También un poco aligerada con zumo de limón, aceite de oliva o agua es un aderezo muy sabroso para las ensaladas.

Se puede hacer con relativa facilidad, en la red hay muchas recetas rigurosas que explican el proceso, pero yo, la verdad la compro hecha porque es fácil encontrarla en el súper.

viernes, 3 de febrero de 2023

Pollo desmechado con verduras y aceitunas.


 

Ha hecho mucho frío, mucho, mucho frío ¿a qué ya os habíais dado cuenta? Seguro que sí.

Así que llevamos un tiempo preparado caldo  día sí, día también; para sopa, puré, cremas, potajes...

Hoy he aprovechado una zanca de pollo del caldo para hacer este plato. No la dejé cocer demasiado tiempo solo el necesario para que se hiciera porque si cuece mucho el caldo queda muy rico pero la carne desaborida.

Con ella preparé este plato de “carne desmechada” a mi manera.



Necesitamos para dos:

Una zanca de pollo cocida.

½ cebolla.

Un puñado de judías verdes, una docena aproximadamente.

Corazones de alcachofas, otra docena. Yo las uso congeladas de pequeño tamaño, que se cocinan en pocos minutos.

Aceitunas negras.

Aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta negra.

Partimos de una zanca cocida; cuando enfríe separamos toda la carne pero no la picamos mucho, la dejamos en hebras un poco largas.

En una sartén ponemos dos cucharadas de aceite y sofreímos la cebolla, con un poco de sal, despacio, hasta que ablande pero no coja color.

Quitamos los extremos y los hilos laterales a las judías verdes; las partimos en trozos y otra vez a lo largo, que nos queden como en tiras. Las escaldamos durante dos minutos en agua hirviendo con sal; escurrimos y reservamos.

Subimos el fuego y añadimos la carne, sazonada con pimienta negra, las judías y los corazones de alcachofa partidos al medio.

Dejamos tres o cuatro minutos a fuego alto para que la carne se tueste un poco, coja un bonito color. En el último minuto ponemos las aceitunas.

miércoles, 1 de febrero de 2023

Lombarda con manzanas y albóndigas.



Sigo publicando platos sencillos, con muchos vegetales y con mucho sabor; saludables, ligeros y variados. Hay que dar una oportunidad a las huertas de invierno que también están repletas de verduras maravillosas.

Todo tipo de coles, repollo, lombarda, coles de Bruselas, coliflor, brócoli; tenemos acelgas, espinacas, alcachofas…¿No me digáis que nada de esto os gusta?

Probad a añadir unos taquitos de panceta, de jamón, o unos mejillones, almejas, o huevos cocidos, o frutos secos…




Necesitamos para dos:

½ lombarda.

½ cebolla.

1 ó 2 zanahorias.

½ manzana.

Aceite de oliva virgen extra, pimienta y sal.


Albóndigas:

Carne picada mezclada de cerdo y ternera, unos 250 gramos. Picada en el momento.

1 huevo.

Miga de pan atrasada y remojada en leche.

1 diente de ajo machacado.

Sal y pimienta negra.

Harina para rebozar.

Aceite de oliva virgen extra para freírlas.


Empezamos adobando la carne para las albóndigas; ponemos en un bol amplio la carne, el huevo entero, el ajo y la miga de pan empapada en leche y escurrida. 

Dejamos en la nevera, cubierto el bol con film, durante un rato para que coja el sabor, mínimo 30 minutos.

Pasado ese tiempo, salamos y hacemos las albóndigas cogiendo porciones de masa, pasándolas por harina y friéndolas. Es mejor hacerlas pequeñas, casi de bocado.

Mientras reposa la carne preparamos la lombarda: en una cazuela con dos cucharadas de aceite sofreímos lentamente la cebolla y las zanahorias, peladas y picadas menudas, durante unos 6 ó 7 minutos.

Añadimos la lombarda picada y bien lavada, suprimiendo los nervios más gruesos, salpimentamos y rehogamos durante unos minutos, 3 ó 4 para que empiece a ablandar.

Agregamos medio pocillo de agua o de caldo vegetal, tapamos y dejamos estofar, tapado, hasta que la lombarda esté tierna ¡sin pasarnos de cocción!

Ponemos la manzana partida pequeñas y las albóndigas fritas; dejamos cocer todo junto un par de minutos y ¡listo!