Una nueva manera, para mí, de comer coliflor:
¡ASADA! ¡Y me ha gustado!
Necesitamos:
Coliflor.
Una cucharadita
de curry, otra de pimentón y otra de nuez moscada.
Un chorro de vino blanco.
Y como siempre sal y aceite de oliva virgen extra.
Encendemos el horno a 180º.
Partimos la coliflor en ramilletes y los lavamos y
secamos. Podemos dejarlos así o partirlos intentando que nos queden todos de un
tamaño similar. Los colocamos en una fuente de horno.
En un bol pequeño mezclamos: el curry, el pimentón y
la nuez moscada; añadimos una pizca de sal y un chorro de aceite.
Con esta mezcla untamos la coliflor.
Agregamos un
chorro de vino blanco en el fondo de la fuente y lo ponemos en el horno
caliente hasta que esté tierna.
El tiempo depende del tamaño de los ramilletes, yo
los tuve unos 25 minutos.
Cuando sale del horno, con una brocha, le di un poco de aceite de oliva virgen extra.
En esta ocasión la tomamos como guarnición pero
puede ser un buen primer plato.
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