Una sopa reconstituyente, sabrosa, ligera, y a la
vez nutritiva. Nada mejor que un plato de sopa calentita para “resucitarnos”
cuando llegamos a casa… cómo llegamos a casa a veces.
Necesitamos:
Repollo, una cebolla, una o dos patatas, entre 4 y 6
langostinos por persona.
Para el caldo de pescado necesitamos:
Una cabeza y espina de merluza, los caparazones y las cabezas de
los langostinos, un trozo de cebolla y una zanahoria.
Y como siempre aceite y sal.
Empezamos haciendo el caldo. En una pota alta
ponemos todos los ingredientes con una cucharada de aceite, sofreímos y cubrimos con agua. Dejamos cocer. Espumamos
bien y dejamos hervir unos 15 minutos.
Probamos de sal, rectificamos si es necesario y
colamos. Ya tenemos el caldo preparado.
Mientras se hace el caldo picamos y lavamos muy bien
el repollo.
Pelamos y partimos la patata en cuadraditos
pequeños.
Pelamos y picamos la cebolla.
Ponemos tres o cuatro cucharadas de aceite en una
pota y sofreímos la cebolla; añadimos las patatas y el repollo, damos unas
vueltas para que se impregne ligeramente de aceite; cubrimos con el caldo y lo
dejamos cocer hasta que esté tierno.
Partimos los langostinos en dos o tres trozos, los
pasamos por una sartén lo justo para que cambien de color y los agregamos al
repollo.
Ya está listo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario