Necesitamos:
Un paquete de obleas de empanadilla.
Champiñones, 300g.
Unos dientes de ajo.
Una guindilla, si os gustan picantes.
Sal y aceite de oliva virgen.
1 huevo.
Empezamos con los champiñones. Lo primero será
cortarles el pie. Después con un paño, o con papel de cocina, húmedo los
limpiamos. Nunca deben mojarse, empapan el agua y pierden mucho sabor.
Los partimos en cuatro o en seis dependiendo del
tamaño.
Pelamos y picamos muy menudos los dientes de ajo y en una sartén con
un poco de aceite de oliva los vamos friendo. Si vais a poner la guindilla
este es el momento (yo la pongo entera para después sacarla). Una vez
dorados los ajos, añadimos los champiñones y ponemos sal.
Dejamos que se vayan cocinando a fuego medio hasta que
pierdan el agua, entre 10 y 15 minutos, depende del tamaño al que los hallamos
partido.
Dejamos que se temple.
En el centro de las obleas ponemos un poco de relleno,
cerramos y con un tenedor sellamos bien el borde.
Calentamos el horno a 190º.
Pintamos las
empanadillas con huevo batido y las metemos en el horno hasta que se doren.
Servimos calentitas.
¡Y listo!
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