... los de toda la vida. Porque ¿quién no tiene en su memoria estos huevos?
Para una cena que puedes dejar preparada, para un
aperitivo, para un segundo plato; para los niños, para los “grandes”.
Cambia el relleno, pon lo que más te guste o lo que
tengas ese día en la despensa y tendrás otro plato distinto.
Yo he hecho hoy
los clásicos: con bonito en aceite y mayonesa.
Cocemos los
huevos, 10 minutos, poniendo en el agua un chorrito de vinagre.
Dejamos enfriar y
pelamos. Los partimos a la mitad, a lo largo; sacamos las yemas.
Mezclamos las
yemas (separamos media para decorar) con el bonito escurrido y mayonesa.
Rellenamos los
medios huevos.
Rallamos la yema
reservada por encima.
Variantes para el relleno:
Probad a picar pimiento asado, o pepinillos o
aceitunas…en este relleno.
Probad a rellenar de otra cosa: salpicón de pescado,
salmón o trucha ahumada...
Si los hacéis para el aperitivo ¿qué os parece con
huevo de codorniz?
En fin probad, y ya me contaréis.
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