Una receta tradicional, en mi infancia receta de “domingo” o
“día de fiesta”.
Fácil de hacer pero un poco laboriosa, con distintos pasos y
con un orden que hay que tener en cuenta porque necesitamos que el relleno se enfríe,
o al menos se temple, antes de utilizarlo.
Tengo que confesar que tuve ayuda: mi nieto, de diez años, se
encargo de rellenar los chipirones, con una cucharilla y paciencia. Es realmente un placer estar en la cocina
mano a mano con una compañía tan especial.
Necesitamos:
6 chipirones por persona.
2 cebollas medianas.
1 tomate maduro.
3 ó 4 dientes de ajo.
1 pimiento verde italiano.
2 huevos cocidos (optativos).
2 bolsas de tinta congeladas.
Sal y aceite de oliva virgen extra.
Empezamos limpiando los chipirones; hay que vaciarlos, quitarles
la pluma y lavarlos muy bien, debajo de chorro de agua, por dentro para evitar que quede algo de arena.
Reservamos los tentáculos y las dos pequeñas aletas que serán
parte del relleno.
Ahora hay que preparar el relleno: en una sartén con dos
cucharadas de aceite freímos dos dientes de ajo y una cebolla, todo bien
picadito; cuando esté pochado añadimos las aletas y los tentáculos, dejamos
cocinar un par de minutos hasta que cambien de color.
Si vamos a poner huevo cocido en el relleno los picamos y los
añadimos a la sartén; dejamos que todo se atempere.
Ahora preparamos la salsa: en una cazuela amplia ponemos
otras dos cucharadas de aceite y sofreímos los dientes de ajo, la cebolla y el
pimiento, a fuego suave y con una pizca de sal.
Cuando esté blando agregamos el tomate pelado y picado;
dejamos que todo se cocine unos 10 minutos.
Trituramos la salsa.
Rellenamos los chipirones con la mezcla que teníamos preparada, sin llenarlos demasiado ya que menguan al cocinarlos y nos reventarían.
La mejor manera es cogerlos con la mano izquierda y la abertura hacia arriba y con una cucharilla pequeña ir llenándolos.
Los cerramos con un
palillo.
Ponemos los chipirones en la salsa con la tinta desleída en ½
vaso de agua, salamos, tapamos y dejamos cocer entre 20/25 minutos.
Para servirlos les quité el palillo pero…no lo volveré a
hacer; hay que sujetarlos con un tenedor y tirar del palillo; creo que mejor que cada comensal quite a los suyos.
Un acompañamiento muy adecuado es el arroz blanco pero
también con patatas fritas, incluso con unos espaguetis al ajillo.
¿Comemos?
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