Una
forma muy sencilla y rápida de preparar un trozo de salmón. Para esta receta os
aconsejo usar la cola o un trozo del lomo, mejor que rajas, ya que podrían
secarse demasiado.
Yo
usé el lomo, abierto y sin la espina. Es bastante grueso y queda jugoso el
interior.
Acompáñalo
de una ensalada, de arroz blanco, de cachelos (patatas hervidas)…
Necesitamos:
Un
trozo de lomo de salmón, sin espina.
2
ó 3 dientes de ajo.
1
cucharada de mostaza.
Un
poquito de vino blanco.
2
cucharadas de vinagre.
Aceite
de oliva virgen.
Perejil
y sal.
Empezamos encendiendo el horno a 190 º para
que esté caliente cuando acabemos de preparar la salsa.
En
una sartén ponemos dos cucharadas de aceite y freímos los dientes de
ajo picados muy menudos. Antes de que cojan color añadimos la
mostaza, el vinagre y el vino blanco (3 ó 4 cucharadas), damos unas
vueltas y dejamos hervir unos dos minutos.
Ponemos
el
salmón en una fuente de horno, salamos y cubrimos con la salsa que
tenemos en la sartén.
Metemos
al horno, que ya estará caliente y lo dejamos unos 10/12 minutos
dependiendo del grosor de la tajada. No conviene hacerlo mucho para que no
quede seco, el interior debe quedar sonrosado.
Ponemos
un poco de perejil fresco picado.
¡Y
listo, a disfrutar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario