miércoles, 27 de julio de 2016

Mermelada de melón con jengibre.





Una mezcla de sabores interesante: el dulce del melón con un regusto un poco picante del jengibre.

Con esta cantidad de azúcar, para mi gusto, ha quedado demasiado dulce pero, claro depende mucho del punto de dulzor del melón y desde luego de vuestro gusto personal; se puede poner menos,  probar e ir añadiendo.

Si os sale un melón un poco “pepino”, quiero decir desaborido, poco dulce, insípido ésta puede ser una buena forma de utilizarlo.


Necesitamos:
Melón, 900 g pesado sin pepitas ni piel.
Manzana unos 250 g,  pelada, sin corazón y partida a trozos.
Azúcar blanco, 250 g.
Jengibre fresco, unos 2 centímetros.

En un bol ponemos el melón en trozos, el azúcar y el jengibre rallado mezclamos  y dejamos marinar durante una hora como mínimo.

Después de ese tiempo agregamos la manzana y lo ponemos todo en una cazuela al fuego a cocer despacio. Al principio el melón soltará mucho jugo, que poco a poco se irá evaporando, por lo que no es necesario dar vueltas constantemente.
Lo trituramos con la batidora y seguimos cociendo hasta que esté espeso.

Lo dejamos enfriar y lo pasamos a un tarro. Si queréis hacer conserva tenéis que esterilizar los tarros; para esta cantidad creo que no merece mucho la pena el esfuerzo ya que se puede consumir rápidamente (al menos en mi casa).


¡Lista para consumir!

viernes, 22 de julio de 2016

Tortos de maíz con setas shiitake.






Con esta receta participo en el Reto Color y Sabor.



Que mejor destino podían tener mis setas shiitake, cultivadas en casa, que unos estupendos tortos de maíz.

Necesitamos para los tortos:
Harina de maíz natural, no sirve tipo Maicena.
Agua caliente con sal.
Aceite para freír.

Para acompañar:
Setas shiitake.
Ajo, sal, aceite (usé de oliva virgen extra aromatizado con romero).





Limpiamos bien las setas, sin mojarlas; como son cultivadas en casa no tienen apenas suciedad, solo, quizá, algo de polvo. Las partimos. 

En una sartén con un poco de aceite ponemos el ajo picadito menudo a freír; en cuanto empieza a coger algo de color añadimos las setas y sal; dejamos que se cocinen, a fuego medio, hasta que la seta esté bien hecha.

Para hacer los tortos ponemos agua a calentar con sal; peñeramos (pasamos por un tamiz fino) la harina y vamos agregando el agua poco a poco; este es el paso más delicado: calcular bien el agua para que queden en su punto ni muy blandos ni muy secos. Amasamos.

Hacemos unas bolas con la masa más o menos iguales y vamos estirando con las manos para hacer los tortos. Éstos se pueden freír o hacer a la plancha (yo los freí).

Admiten muchos acompañamientos. En Asturias es muy tradicional acompañarlos con picadillo de chorizo, huevo frito, paté, queso y dulce de manzana… En las majadas de los Picos de Europa los pastores los toman con un buen pedazo de mantequilla.

Torto con chorizo.

Torto con mermelada.
 
Mini torto con paté de zanahoria.